Seguro que se acuerdan de que hace un mes, cuando les hablé del kit de supervivencia, que recomienda la UE para garantizar la autosuficiencia durante al menos 72 horas, les adelante que lo terminarán fabricando los chinos, nos saldrá a unos 200 euros por barba y se convertirá en un negocio redondo para comisionistas como Zapatero, Bono o Pepiño Blanco.
Lo que no tenía entonces claro todavía es que el kit de Pedro Sánchez, el que alista para aguantar en La Moncloa hasta 2027, nos iba a costar a los españoles la friolera de 10.500 millones.
Porque lo que ha anunciado el marido de Begoña, como certeramente ha sintetizado Feijóo, no es un plan de Defensa de España; ni siquiera del Gobierno Frankenstein. Es el plan de ‘autodefensa’ del Nº-1 de la tentacular trama de corrupción montada por el PSOE.
Tiene la caradura Sánchez de citar a Ucrania y de asegurar que esa millonada, decidida sin presupuestos y sin contar con el Parlamento, no implicará recortes sociales, ni subidas de impuestos.
Imagino que el trilero pretende salir del paso renombrado partidas y haciendo pasar por gasto bélico lapiceros, chiringuitos ecológicos, subvenciones transgénero, vacunas, videojuegos y hasta latas de conserva, confiando en los empinados burócratas de Bruselas traguen como tragan con casi todo.
Donde no se le puede dar ni agua es aquí en España y la oposición tiene que ir a degüello.
Olvídense de lo que farfullen Sumar, Podemos, Compromís, Bildu, BNG, ERC y demás yerbas, porque esos zarrapastrosos nunca se han visto mejor que a la sombra de Sánchez y cacarearán un poco, pero a la hora de la verdad agacharan la cabeza, porque les van el puesto y el sueldo en ello.
La oposición, además de exigir a voces que se debata el asunto en el Congreso, tiene que dejar claro que no va a apoyar el ‘kit de Sanchez’ en ningún caso y que no se siente en absoluto obligada de cara al futuro.
Que cuando haya elecciones generales, que las habrá, y gane, todo eso -además del Tribunal Constitucional, los cargos en Fiscalía, los nombramientos en empresas públicas, los directivos de RTVE, la infame Ley de Memoria Histórica, la profanación del Valle de los Caídos y lo que cuelga- se irá a la papelera.
¡A ver si es verdad!
