Tremendo y en cierto sentido misterioso.
Este sábado 8 de febrero de 2025, los madrileños se toparon con una impresionante columna de humo que se elevaba desde el corazón de la ciudad.
El origen: un incendio en el parking subterráneo de la calle Marqués de Urquijo, en el distrito de Moncloa.
Lo que parecía un siniestro rutinario pronto se convirtió en un desafío mayúsculo para los bomberos de la capital.
La razón: los protagonistas del incendio eran dos coches eléctricos.
El incidente comenzó alrededor de las 14:00 horas en la planta -1 del aparcamiento.
Rápidamente, el fuego se propagó, generando una densa humareda que obligó a cortar el tráfico en la zona.
La Policía Municipal de Madrid tuvo que acordonar el área mientras diez dotaciones de bomberos luchaban contra las llamas.
Aunque las causas exactas aún se desconocen y están siendo investigadas, podemos plantear algunas hipótesis basadas en la información disponible:
- Fallo en las baterías: La causa más probable podría ser un fallo en las baterías de iones de litio de los vehículos. Estas baterías pueden sufrir un fenómeno conocido como «fuga térmica» si se dañan o sobrecalientan, lo que puede desencadenar un incendio difícil de controlar.
- Problema durante la carga: Si los vehículos estaban conectados a puntos de carga en el momento del incidente, un fallo en el sistema de carga o una sobrecarga podrían haber provocado el incendio.
- Daño externo: Un impacto o daño físico a las baterías podría haber comprometido su integridad, llevando a un cortocircuito interno.
El desafío de apagar un coche eléctrico en llamas
Pero, ¿qué hace que el incendio de un coche eléctrico sea tan difícil de controlar?
La respuesta está en el corazón de estos vehículos: sus baterías de iones de litio.
Estas baterías, aunque altamente eficientes, pueden convertirse en un dolor de cabeza para los servicios de emergencia cuando se incendian.
El Dr. Carlos Fernández, experto en seguridad de vehículos eléctricos de la Universidad Politécnica de Madrid, explica:
«Las baterías de iones de litio almacenan una gran cantidad de energía en un espacio muy reducido. Cuando se dañan o sobrecalientan, pueden entrar en lo que llamamos ‘fuga térmica’, un proceso en el que el calor se propaga de una celda a otra, creando un efecto dominó difícil de detener».
Este fenómeno es precisamente lo que ocurrió en el parking de Moncloa.
Los bomberos se enfrentaron a un incendio que no solo era intenso, sino que además se realimentaba constantemente.
La extinción convencional con agua resulta poco efectiva, ya que el litio reacciona con ella, pudiendo incluso agravar la situación.
El Supervisor de Bomberos de Madrid, Julio Rodríguez, comentó sobre el incidente:
«Nos enfrentamos a un nuevo tipo de desafío. Los incendios de coches eléctricos requieren técnicas y equipos especializados. En este caso, tuvimos que emplear mantas térmicas y grandes cantidades de agua para enfriar las baterías y evitar que el fuego se reavivara».
Mitos y realidades: ¿Se incendian más los coches eléctricos?
Pero, ¿son realmente los coches eléctricos más propensos a incendiarse que los de combustión tradicional?
Contrariamente a lo que se podría pensar, las estadísticas sugieren que no.
Un estudio reciente de la Agencia Sueca de Contingencias Civiles reveló que los vehículos eléctricos tienen 20 veces menos probabilidades de incendiarse que los automóviles de gasolina y diésel.
Según datos de la Asociación Empresarial para el Desarrollo e Impulso de la Movilidad Eléctrica (AEDIVE), por cada 100.000 unidades vendidas, se registran:
- 3.474 incendios en vehículos híbridos
- 1.530 incendios en vehículos de combustión (diésel y gasolina)
- Solo 25,1 incendios en coches eléctricos
Sin embargo, cuando un coche eléctrico se incendia, el proceso de extinción es mucho más complejo y prolongado.
En el caso del parking de Marqués de Urquijo, los bomberos tardaron más de tres horas en controlar completamente el fuego, y tuvieron que mantener una vigilancia constante durante las siguientes 48 horas para prevenir posibles reactivaciones.
El futuro de la movilidad eléctrica: ¿Una apuesta segura?
A pesar de estos desafíos, los expertos coinciden en que la movilidad eléctrica sigue siendo el futuro del transporte urbano.
El Dr. Fernández añade:
«No debemos olvidar que la tecnología está en constante evolución. Cada incidente nos enseña algo nuevo y nos permite mejorar la seguridad de estos vehículos».
Las grandes potencias mundiales están apostando fuerte por esta tecnología.
China lidera actualmente la producción de vehículos eléctricos, mientras que la Unión Europea ha establecido ambiciosos objetivos para reducir las emisiones de CO2 en el transporte.
Estados Unidos, por su parte, ha anunciado importantes inversiones en infraestructura de carga y producción de baterías.
Los fabricantes de coches eléctricos están trabajando en nuevas tecnologías para hacer las baterías aún más seguras. Algunas empresas están experimentando con electrolitos sólidos que podrían reducir significativamente el riesgo de incendio.
Otras están desarrollando sistemas de gestión térmica más avanzados para prevenir la fuga térmica.
Coches eléctricos
- En Noruega, país líder en adopción de vehículos eléctricos, los bomberos han desarrollado contenedores especiales para sumergir coches eléctricos incendiados y evitar la propagación del fuego.
- Algunos departamentos de bomberos en Estados Unidos están entrenando a perros para detectar el olor característico de las baterías de litio sobrecalentadas, permitiendo una intervención temprana.
- En Japón, se está experimentando con robots bomberos especializados en la extinción de incendios de vehículos eléctricos en espacios confinados como parkings subterráneos.
- Un fabricante alemán ha desarrollado un «airbag térmico» que se despliega alrededor de la batería en caso de accidente, aislándola y reduciendo el riesgo de incendio.
- En China, algunas ciudades han comenzado a instalar «estaciones de carga inteligentes» que pueden detectar anomalías en las baterías y cortar la alimentación antes de que se produzca un incendio.